lunes, 30 de julio de 2007

SITUACIÓN GEOPOLÍTICA MUNDIAL

1 PRIMERA PARTE: NORTEAMÉRICA

A principios del presente siglo, Estados Unidos se lanzó a una ofensiva total para consolidar su posición hegemónica como única superpotencia. El objetivo de esa ofensiva, por muchos eufemismos que se quisieran inventar, o por mucho que se intentara manipular a la opinión pública mundial, era bien sencillo. Ante la crisis energética que se avecina para los próximos años, y dado que E.E.U.U. es el país más endeudado del mundo, se trataba de controlar (robar) las principales reservas energéticas mundiales, antes de que los chinos se hicieran con ellas por mero empuje económico. De esa forma, no sólo se conseguiría frenar el inevitable ascenso chino sino que se aislaría a los rusos y su grupo de países "malvados", dejando al resto de la humanidad a merced del yugo yanqui y asegurando la hegemonía por unas décadas más. Huelga decir que el demente plan yanqui ha sido un fracaso sonado, y que no ha hecho más que precipitar el declive imperial. Veamos dónde han fallado.

-Irán/Iraq: el objetivo era conquistar Iraq para quedarse el petróleo iraquí y luego desestabilizar Irán provocando un cambio de régimen para saquear a los iraníes también. Después del fracaso en Iraq, lo de Irán era inviable. Como Estados Unidos es un país cobarde que sólo ataca a países desarmados, era evidente que no iban a atreverse con los persas, que a diferencia de sus vecinos sí que cuenta con un ejército serio, convenientemente armado por Putin. Se ha inventado el cuento de la energía nuclear y las bombas iraníes para intentar estrangular diplomática y económicamente a Teherán, pero actualmente los bloqueos económicos yanquis no sirven absolutamente de nada porque los chinos están forrados y se los saltan a la torera cuando les sale de los cojones. Los yanquis pueden hacer desaparecer del mapa cualquier país del mundo apretando un par de botones, pero no pueden conquistarlo porque su opinión pública no admite bajas. La población de los países que invaden, además de estar ya bastante exacervada de por sí, también se les revela porque los americanos no tienen dinero para planes Marshall y por lo tanto no pueden reconstruir los países que arrasan. El futuro de oriente medio pasa por el caos o por la inevitable ascensión de Irán, apoyada por Rusia y China, y el declive de Arabia Saudí e Israel, estado financiado por los presupuestos estatales yanquis.

-Palestina: eliminado Arafat, nada como poner a un grupo de agentes de la CIA y del MOSSAD en el gobierno palestino para asegurarse el predominio en la zona de Israel. El problema es que los palestinos no son tan imbéciles como los yanquis creen. A falta de ver como acaba todo, por el momento la Autoridad Palestina títere ha sido vencida por Hamás, primero en las urnas, y como eso no ha sido suficiente, también mediante un golpe de estado.

-Líbano: aquí se trataba simplemente de que Israel invadiera el Líbano para reforzar el gobierno vasallo y asegurar para Israel los recursos hidráulicos en manos de los chiítas y la posibilidad de construir oleodoctos para suplir a Israel de energía desde Turquía. Ese plan se encargó de desbaratarlo Putin suministrando a la resistencia chiíta libanesa, por medio de Irán de y Siria, las más efectivas armas anti-tanque que existen hoy en día en el mercado mundial. http://http://www.voltairenet.org/article143061.html

-Venezuela: el primer golpe de estado mediático mundial fracasó cuando millones de venezolanos bajaron de los barrios humildes de Caracas hasta el Palacio presidencial para rescatar a su presidente democráticamente electo y tirar de allí a los usurpadores pro yanquis. Desde entonces ha habido algunos intentos de conspiración y de predisponer a la opinión pública mundial hacia un presidente cuyo único delito ha sido el de no permitir que los recursos narurales de su país fueran expoliados por las multinacionales extranjeras. En estos momentos, una invasión de Venezuela es impensable, pero podría suceder si las cosas se pusieran feas en el futuro y la energía empezara a escasear y el modo de vida occidental se viera amenazado. Hay que tener en cuenta que los venezolanos cuentan con un tipo de crudo que actualmente no se usa por ser muy caro de extraer, pero que con precios del petróleo muy altos pasa a ser rentable y convierte a Venezuela en el país poseedor de las mayores reservas del mundo. Por eso Putin (nuestro futuro presidente del gobierno) está dotando al país caribeño de suficientes armas defensivas como para hacer que los americanos del norte se lo piensen dos veces o más. Mientras tanto, la economía venezolana va viento en popa, los índices de popularidad de Chávez entre sus ciudadanos están por las nubes y nada hace pensar que eso vaya cambiar a corto plazo.

-Cuba: la resistencia de Cuba, más que un perjuicio directo a los intereses norteaméricanos en la zona, es una derrota moral después de décadas de bloqueo económico, presión propagandística y actos terroristas de diversa índole. Cuba ha salido ya del periodo de miseria en el que se sumió tras el derrumbe del bloque soviético, y aunque persisten algunos problemas su economía crece a un ritmo considerable y nada parece indicar que si Fidel Castro muriera algún día (hecho que muchos dudan que pueda ocurrir) se produciría un cambio de modelo económico en la isla.

-Además de Venezuela, una ola de gobiernos nacionalistas de izquierda se están liberando del yugo imperialista en toda latinoamérica, y van recuperando el control de sus recursos naturales en beneficio de las poblaciones locales. Por ese motivo, la "élite" económica y mediática anglosajona se ha echado a temblar y les llama "populistas y "dictatoriales"

En esta coyunctura, la posición de los yanquis es difícil. Huelga decir que la población mundial ha venido dándose vuenta de que la cultura anglosajona y su forma de vida es el peor cáncer del planeta y la mayor amenaza contra la paz mundial y contra la justicia en el mundo. Si por un lado han obligado al resto de la humanidad (bien por la fuerza, o bien mediante la presión de sus medios de propaganda) a adoptar unos modos económicos que no sólo son inviables sino que amenazan la supervivencia de la especie humana y el ya precario equilibrio ecológico del planeta, por otro han provocado la creación del terrorismo islámico gracias a su política de matar árabes para robarles el petróleo y la de apoyarse en grupos integristas para llevar a cabo sus intereses maquiavélicos aquí y allá. Mediante el expolio de los recursos del tercer mundo para mantener su absurdo estilo de vida despilfarrador y avaricioso, los también llamados anglocabrones han conseguido difundido el hambre, la miseria y la enfermedad por todos los rincones del planeta.

Pero lo más absurdo de todo es la propia esencia del capitalismo anglosajón, cuyo objetivo es crecer infinitamente. Si los recursos energéticos y las materias primas fueran infinitas, no habría problema, pero da la casualidad el petróleo se acaba y no hay alternativa viable. Los combustibles biológicos no son solución válida, sino todo lo contrario. Aunque se produjeran biocombustibles a partir de todos los terrenos cultivables del mundo, no darían para suplir el consumo actual de petróleo, y además nos moriríamos de hambre. La única alternativa al petróleo es el ahorro energético. La economía no puede crecer siempre, como sabe bien cualquier persona que haya jugado a cualquier juego de estrategia de ordenador tipo Age of Empires. Usualmente, no se pelea para machacar al contrario, sino para arrebatarle los recursos básicos, y cuando esto ya se ha conseguido, se le machaca.

Si la resistencia antiperialista sigue aguantando, como parece que va a ocurrir, los E.E. U.U. lo tienen bien crudo. Actualmente son un país arruinado que se financia fundamentalmente a base de créditos chinos, y que se mantendrá a flote mientras a los chinos les sea indispensable mantenerles como mercado. El dólar está tan devaluado que sale más barato limpiarse el culo con billetes verdes que comprar papel higiénico de verdad. Ya hemos visto que Estados Unidos está estancado en Oriente Medio y que está perdiendo los recursos que antes robaba con toda impunidad en Latinoamérica. El problema para ellos es que no van a renunciar a su absurdo y codicioso estilo de vida. Quizás los europeos podamos hacerlo cuando llegue el momento, y también los rusos y los chinos, que han sido comunistas durante años y cuyos modos de vida son más austeros. Pero para un americano eso es inviable e inconcevible, porque supondría renunciar a su esencia y a su identidad como nación, y a su tan querida "American way of life"

Cuando el petóleo esté a punto de acabarse, es probable que él primer movimiento de los gringos sea un intento de anexionarse Canadá y sus vastas reservas de hidrocarburos. El imperio goza del mejor ejército del mundo en términos cuantitativos. (En términos cualitativos, hace ya bastante tiempo que los rusos superan a los américanos en casi todos los campos de la industria bélica, como se está demostrando en los partidos de fútbol celebrados en el Lbano, en Iraq y en Afganistán). Ya que es imposible que Estados Unidos gane una guerra contra cualquier país protegido por Rusia, la opción canadiense es la más cómoda, fácil y segura a simple vista, aunque no olvidemos que Canadá es el país con más armas por persona del mundo, y que los americanos, por lo tanto tendrían que luchar casa por casa contra unos leñadores exacervados, buenos conocedores del terreno, en un clima hostil y un terreno que es ideal para la guerrilla, pues combina grandes núcleos urbanos con inmensas áreas de bosque tenebroso, donde es fácil ocultarse y cuya población se haya tremendamente dispersa.

Y aún cuando consiguieran la victoria, eso no haría sino dejarlos exhaustos precipitar su declive. En cuanto Rusia se haga con el dominio de Europa, y China haga lo propio con Asia y Africa, el partido de fútbol se habrá terminado, y si la humanidad sobrevive a la agonía imperial, comenzará otra liga con equipos diferentes, Estados Unidos siendo un mero Cádiz descendido a segunda B.

PRÓXIMA ENTREGA: LATINOAMÉRICA

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Colosal análisis. Espero ávido la segunda entrega.

Me quito el craneo.

Anónimo dijo...

excelente, aunque supongo al final te has pasado un poco.